Muchos los saben, y la verdad es que me da algo de lata el que más gente lo sepa: aún soy fumador. Una especie mutante de nuestra humanidad, que va echando humo por la vida, colillas por el suelo, y “malos aromas” por el viento. Y para qué estamos con cosas, hoy fumar es casi un delito por la nueva ley (la cual comparto y respeto), y una tortura al ver cada vez que compro una cajetilla a Don Miguel, mirándome como diciéndome “puta que lata, volviste a comprar”. Es tanto lo que lo he visto en las últimas semanas que decidí entrevistarlo para mi Blog.
Fui a comprar una cajetilla y allí me estaba esperando Don Miguel, caminamos juntos, lo senté en una silla para que estuviera cómodo, y nos dispusimos a conversar; “¿cómo prefiere que le diga, Don Miguel o Miguel a secas? “Dime Miiiguueeelllll”…vale decirlo, me costó mucho escucharlo ya que hablar por la laringe además de ser muy complicado no suena gustoso al oído.
Aproveché de interrogarle si acaso estaba de acuerdo con la antipropaganda que aparece al costado de la cajetilla, y me cuenta que no tiene idea de que hablo, así que lo invito a que hagamos unas pruebas para comprobar si dichas advertencias son verdad o no.
Alquitrán, producto que te produce cáncer. Miguel me dice que su situación actual lo corrobora, sin embargo le refuto ya que su cáncer se podría haber generado por la ingesta de plomo a través del agua (se me ocurrió ahí mismo). Le propuse una prueba más contundente, ir a buscar un camino con alquitrán derretido y comerlo en cantidades. Después de comer varias cucharadas y pasarlas con Coca Cola (recuerden los efectos beneficiosos de dicha bebida) decidimos evaluar:
- Daños directos: quedamos con el hocico absolutamente negro, una diarrea de petróleo, y water tapado.
- Daños colaterales: mi cepillo de dientes quedó hecho una porquería, $10.000 por destapar el water y $25.000 por la limpieza dental.
- Conclusión: Asqueroso, doloroso, pero no mortal. Algo caro los daños colaterales.
Nicotina, producto que te hace adicto. Miguel me cuenta que los 20 años que fumó nunca pudo dejarlo. “Basta Miguel de pendejadas” le digo, “El cigarro se deja cuando uno quiere, yo lo he dejado como 20 veces”. Vamos donde un químico amigo y le pedimos que inyecte con nicotina cosas que nunca he comido porque me desagradan para ver si me vuelvo adicto a ellas. Esperamos 3 semanas con Miguel antes de evaluar:
- Daños directos: Tengo más guata que el cordel de la ropa de tanto comer bruselas, mote, cochayuyo y queso de cabeza.
- Daños colaterales: Me he tirado tanto pedo por las Bruselas que ya nadie se junta conmigo. El cochayuyo me dejó los dientes amarillos, tuve que ir nuevamente al dentista.
- Conclusión: Parece que hay relación, asumimos por lo mismo que las carteras, zapatos y ropa de mujer es impregnada en forma solapada con nicotina.
Monóxido de carbono, gas tóxico igual al que emana de los tubos de escape. Le pedí a Miguel que pusiera la cara frente al tubo de escape de mi auto, mientras yo estaba con un amigo fumador, al cual le pedí que me tirara el humo en la cara. Miguel a los 3 minutos lo vi complicado, a los 10 minutos estaba negro, y a los 15 minutos se desmayó. Yo en cambio a los 15 minutos estaba fumando (además de recibir el humo de mi amigo). Dejamos a Miguel en una cama y preparamos un asado para probar con más humo.
- Daños directos: En el caso de Miguel pérdida de conciencia, cara ennegrecida, jaqueca fuerte por varios días. En mi caso cero.
- Daños colaterales: Tratamiento facial para Miguel $12.000, Aspirina $1.900, y Sal de Fruta $2.450 (por el pisco sour, el asado, la cerveza, el ron, el vino, y los bajativos).
- Conclusión: El tamaño sí importa, el viento a favor o en contra distorsiona los resultados, y la capacidad pulmonar para aguantar el aire disminuiría los daños. No es necesario el dentista.
Arsénico, químico utilizado como veneno para ratas. Noto a Miguel nervioso, le digo que unas pelotitas de veneno para ratones no le puede hacer un daño grave, él es cerca de 200 veces más grande que el peor de los guarenes. “Ánimo Miguel que con esta prueba terminamos” le digo. Miguel me mira receloso, toma las pelotas de veneno para ratas, se sienta un rato, comienza a quedarse dormido, no despierta más. Miguel murió.
- Daños directos: Miguel se murió y por defecto terminó la entrevista.
- Daños colaterales: $750.000 el funeral “all include”. Me acompaña el dentista a la misa y aprovecha de cobrarme la consulta a la cual no fui.
- Conclusión: Hay pruebas que basta leerlas, no hay para qué hacerlas.
PS: No fumes en lugares públicos, fiestas, comidas, etc., así evitas convidar.